El crecimiento industrial generado por el nearshoring de empresas ha sido fundamental para el desarrollo de ciertos estados de México, gracias a tres de sus regiones con más fuertes oportunidades: la frontera, el Bajío y el Centro.

Se puede ver como algunos estados de la frontera norte como Nuevo León, Chihuahua y Coahuila se destacan por su infraestructura de vanguardia y competitividad global. Estos estados dominan el ranking del IDI 2024 debido a su sólida infraestructura, liderazgo en exportaciones manufactureras y alta participación en el Producto Interno Bruto (PIB) industrial. 

La cercanía de esta región con Estados Unidos y su infraestructura logística hacen de la Frontera Norte un lugar perfecto para el nearshoring, favorecido por la relocalización de empresas debido a los cambios en las cadenas de suministro globales. Mientras que algunos estados del Bajío como Querétaro, Jalisco y Guanajuato se han consolidado como un centro de innovación tecnológica y sostenibilidad. 

Por otro lado, algunos de los estados ubicados en el centro del país, como la Ciudad de México, el Estado de México y Puebla, juegan un papel crucial en el desarrollo industrial debido a su alta disponibilidad de talento calificado, excelente conectividad y una economía complementaria que favorece el crecimiento conjunto.

El índice del desarrollo industrial 2024 menciona que México dispone de una estructura industrial robusta, destacándose las regiones de la Frontera Norte, el Bajío y el Centro, las cuales están bien posicionadas para aprovechar las tendencias globales de inversión y sostenibilidad.

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